El amar de Dios
Como Cristianos en mas de una ocasión hemos escuchado esa palabra Dios te ama, tal vez en mas de una ocasión se la hemos trasmitido a otra persona, Dios en su palabra nos dice que nos ama: porque de tal manera amo Dios al mundo que dio a su hijo unigénito para que todo aquel que crea en el no muera si no que tenga vida eterna.
Ya habrás escuchado esto, otra parte de su palabra nos dice como es su amor dice que el amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta y me gustaría recalcar estas palabras todo lo sufre si te pones a pensar hay muchas maneras de explicar esta parte pero tratare de resumirte lo hare de una forma conocida Jesucristo vino a la tierra a dar su vida por ti sufrió el tormento de la crucifixión pero antes de eso muchos latigazos que deberían de ser para ti.
En 1de corintios 13 Dios nos dice como es su amor pero me gustaría hablarles del vr 7 nos dice: Que el amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, todo lo cree, tal vez te preguntaras Dios cree en mi, la verdad es que si dice en otra parte de su palabra que el te ha escogido, Isaias 43:10 eres parte de sus elegidos para que le conozcáis, también dice vosotros sois mis testigos Dios cree en ti, tu puedes lograr lo que quieras solo tienes que creer mas en Dios y en ti mismo, todo lo espera, como tu sabes el no obliga a nadie a que este con el, espera que tu tomes la decisión ya sea de seguirle o de servirle tu tomas la decisión todo lo soporta mas adelante te explicare mejor esta parte pero te diré que cada día hacemos cosas que no agradan a Dios y aun así el lo soporta todo porque el realmente te ama mas de lo que tu pudieras imaginar ahora para seguir adelante me gustaría hacerte una pregunta y que seas sincero contigo mismo y con tu Padre Celestial ¿Amas a Dios? Si tu respuesta es si me encantaría que leyeras esta historia…
Ya habrás escuchado esto, otra parte de su palabra nos dice como es su amor dice que el amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta y me gustaría recalcar estas palabras todo lo sufre si te pones a pensar hay muchas maneras de explicar esta parte pero tratare de resumirte lo hare de una forma conocida Jesucristo vino a la tierra a dar su vida por ti sufrió el tormento de la crucifixión pero antes de eso muchos latigazos que deberían de ser para ti.
En 1de corintios 13 Dios nos dice como es su amor pero me gustaría hablarles del vr 7 nos dice: Que el amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, todo lo cree, tal vez te preguntaras Dios cree en mi, la verdad es que si dice en otra parte de su palabra que el te ha escogido, Isaias 43:10 eres parte de sus elegidos para que le conozcáis, también dice vosotros sois mis testigos Dios cree en ti, tu puedes lograr lo que quieras solo tienes que creer mas en Dios y en ti mismo, todo lo espera, como tu sabes el no obliga a nadie a que este con el, espera que tu tomes la decisión ya sea de seguirle o de servirle tu tomas la decisión todo lo soporta mas adelante te explicare mejor esta parte pero te diré que cada día hacemos cosas que no agradan a Dios y aun así el lo soporta todo porque el realmente te ama mas de lo que tu pudieras imaginar ahora para seguir adelante me gustaría hacerte una pregunta y que seas sincero contigo mismo y con tu Padre Celestial ¿Amas a Dios? Si tu respuesta es si me encantaría que leyeras esta historia…
Un día Dios hablo conmigo…
Un día, temprano por la mañana, me levanté para observar la salida del sol. ¡Es asombroso, la belleza de la creación de Dios va mucho más allá de cualquier descripción! Mientras observaba el paisaje, alababa a Dios por su bella obra, y allí sentado, sentí la presencia del Señor.
Entonces, Él me preguntó, ¿Me amas? Yo contesté, ¡Por supuesto, Dios! ¡Tú eres mi Señor y Salvador! Entonces me preguntó, Si estuvieras físicamente incapacitado, ¿aún me amarías? Me quedé sorprendido, bajé la mirada, me quedé unos minutos en silencio. Y contesté: Sería difícil, Señor, pero, si, aún así te amaría. Entonces el Señor dijo: Si estuvieras ciego, ¿amarías mi creación? ¡Cómo podría amar algo, sin poder verlo! Y entonces pensé en las personas ciegas que aman a Dios y a su Creación.
Así que contesté: Es difícil, pero si aún te amaría. El Señor entonces me preguntó: Si fueses sordo, ¿oirías mi Palabra? ¿Cómo podría oír algo siendo sordo? Entonces comprendí. Escuchar la Palabra de Dios no es solamente usar nuestros oídos, sino nuestros corazones. Contesté: Sería difícil, pero aún oiría tu Palabra. El Señor entonces preguntó: Si estuvieses mudo, ¿alabarías mi Nombre? ¡Pero cómo puedo alabar sin voz! Entonces pensé que Dios desea que le cantemos desde nuestro corazón y que de todas maneras, alabar es más que cantar.
Entonces contesté: Aunque estuviera mudo, alabaría tu Nombre. Y el Señor preguntó: ¿En realidad me amas? Con valor y profunda convicción, le contesté: ¡Sí Señor! ¡Te amo por que Tú eres el Dios único y verdadero! Pensé que había contestado correctamente, pero Dios preguntó: ¿Entonces por qué pecas? Contesté, ¡Porque soy un ser humano y no soy perfecto! ¿Y por qué cuando las cosas te van bien te apartas tan lejos de mí? ¿Por qué sólo en tiempos de angustia oras sinceramente? No hubo respuestas. Sólo lágrimas. El Señor continuó, ¿Por qué solamente cantas en la iglesia? ¿Por qué me buscas sólo en tiempos de necesidad? ¿Por qué pides cosas tan egoístas? ¿Por qué pides sin tener fe? Las lágrimas, continuaron rodando sobre mis mejillas. ¿Por qué te avergüenzas de mí? ¿Por qué no compartes las buenas nuevas? ¿Por qué en tiempos difíciles, lloras con otros, cuando yo te ofrezco mi hombro para que lo hagas? ¿Por qué pones pretextos cuando te doy la oportunidad de servir en mi Nombre?" Intenté contestar, pero no hubo respuesta que dar.
Eres bendecido con la vida. No te hice para que desperdiciaras este regalo. Te he bendecido con talentos para servirme, pero continúas dándome la espalda. Te he revelado mi Palabra, pero no obtienes el conocimiento de ella. Te he hablado pero tus oídos estaban cerrados. Te he mostrado mis bendiciones, pero tus ojos nunca las vieron. He oído tus oraciones y las he contestado todas.
¿En verdad me amas? No podía contestar. ¿Cómo podría hacerlo? Estaba increíblemente apenado. No tuve excusa. ¿Qué podía decir? Cuando mi corazón hubo llorado y las lágrimas habían fluido, dije ¡Por favor perdóname Señor! ¡Soy indigno de ser tu hijo! El Señor contestó, nadie es indigno, esa es mi Gracia, hijo. ¿Entonces por qué continúas perdonándome? ¿Por qué me amas tanto? El Señor contestó: Por que tú eres mi creación. Tú eres mi hijo. Nunca te abandonaré. Cuando llores, tendré compasión y lloraré contigo.
Cuando estés gozoso, me alegraré contigo. Cuando estés deprimido, te animaré. Y cuando caigas, te levantaré. Cuando te sientas cansado, te llevaré sobre mis hombros. Estaré contigo hasta el fin de los días, y te amaré por siempre. Nunca antes había llorado como en ese instante. ¡Cómo pude haber sido tan frío! ¡Cómo pude lastimar a Dios con todo lo que hice! Entonces yo le pregunté a Dios, ¿CUANTO ME AMAS? El Señor me estrechó en sus brazos, y pude sentir como nunca antes su Amor, su Gracia y su Misericordia.
Entonces, Él me preguntó, ¿Me amas? Yo contesté, ¡Por supuesto, Dios! ¡Tú eres mi Señor y Salvador! Entonces me preguntó, Si estuvieras físicamente incapacitado, ¿aún me amarías? Me quedé sorprendido, bajé la mirada, me quedé unos minutos en silencio. Y contesté: Sería difícil, Señor, pero, si, aún así te amaría. Entonces el Señor dijo: Si estuvieras ciego, ¿amarías mi creación? ¡Cómo podría amar algo, sin poder verlo! Y entonces pensé en las personas ciegas que aman a Dios y a su Creación.
Así que contesté: Es difícil, pero si aún te amaría. El Señor entonces me preguntó: Si fueses sordo, ¿oirías mi Palabra? ¿Cómo podría oír algo siendo sordo? Entonces comprendí. Escuchar la Palabra de Dios no es solamente usar nuestros oídos, sino nuestros corazones. Contesté: Sería difícil, pero aún oiría tu Palabra. El Señor entonces preguntó: Si estuvieses mudo, ¿alabarías mi Nombre? ¡Pero cómo puedo alabar sin voz! Entonces pensé que Dios desea que le cantemos desde nuestro corazón y que de todas maneras, alabar es más que cantar.
Entonces contesté: Aunque estuviera mudo, alabaría tu Nombre. Y el Señor preguntó: ¿En realidad me amas? Con valor y profunda convicción, le contesté: ¡Sí Señor! ¡Te amo por que Tú eres el Dios único y verdadero! Pensé que había contestado correctamente, pero Dios preguntó: ¿Entonces por qué pecas? Contesté, ¡Porque soy un ser humano y no soy perfecto! ¿Y por qué cuando las cosas te van bien te apartas tan lejos de mí? ¿Por qué sólo en tiempos de angustia oras sinceramente? No hubo respuestas. Sólo lágrimas. El Señor continuó, ¿Por qué solamente cantas en la iglesia? ¿Por qué me buscas sólo en tiempos de necesidad? ¿Por qué pides cosas tan egoístas? ¿Por qué pides sin tener fe? Las lágrimas, continuaron rodando sobre mis mejillas. ¿Por qué te avergüenzas de mí? ¿Por qué no compartes las buenas nuevas? ¿Por qué en tiempos difíciles, lloras con otros, cuando yo te ofrezco mi hombro para que lo hagas? ¿Por qué pones pretextos cuando te doy la oportunidad de servir en mi Nombre?" Intenté contestar, pero no hubo respuesta que dar.
Eres bendecido con la vida. No te hice para que desperdiciaras este regalo. Te he bendecido con talentos para servirme, pero continúas dándome la espalda. Te he revelado mi Palabra, pero no obtienes el conocimiento de ella. Te he hablado pero tus oídos estaban cerrados. Te he mostrado mis bendiciones, pero tus ojos nunca las vieron. He oído tus oraciones y las he contestado todas.
¿En verdad me amas? No podía contestar. ¿Cómo podría hacerlo? Estaba increíblemente apenado. No tuve excusa. ¿Qué podía decir? Cuando mi corazón hubo llorado y las lágrimas habían fluido, dije ¡Por favor perdóname Señor! ¡Soy indigno de ser tu hijo! El Señor contestó, nadie es indigno, esa es mi Gracia, hijo. ¿Entonces por qué continúas perdonándome? ¿Por qué me amas tanto? El Señor contestó: Por que tú eres mi creación. Tú eres mi hijo. Nunca te abandonaré. Cuando llores, tendré compasión y lloraré contigo.
Cuando estés gozoso, me alegraré contigo. Cuando estés deprimido, te animaré. Y cuando caigas, te levantaré. Cuando te sientas cansado, te llevaré sobre mis hombros. Estaré contigo hasta el fin de los días, y te amaré por siempre. Nunca antes había llorado como en ese instante. ¡Cómo pude haber sido tan frío! ¡Cómo pude lastimar a Dios con todo lo que hice! Entonces yo le pregunté a Dios, ¿CUANTO ME AMAS? El Señor me estrechó en sus brazos, y pude sentir como nunca antes su Amor, su Gracia y su Misericordia.
Reflexiona:
Cuantas veces has platicado con DIOS………
Y tú ¿En verdad le amas?
Me encantaría saber que piensas sobre esta primera parte de la palabra El amar de Dios la segunda parte la publicare en estos próximos días espero que esta parte haya sido de bendición a tu vida.
Oración
Papito que estas en los cielos hoy vengo ante tu presencia primero dándote las gracias por este día de vida por que estamos bien y por todas tus bendiciones gracias por tu amor papito te pido que seas tu bendiciendo a cada una de las personas que lean esta publicación esta palabra inspirada por ti bendícelas papito en el nombre de tu hijo Jesús amen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario